La Kikis está furiosa.
Dice que no tengo madre por poner el título de mi colaboración anterior citando a don Diablo.
No conozco al Gobernador Ulises Ruiz. La unica vez que platiqué con él fue cuando visitó a los maestrantes de Políticas Públicas en la Universidad José Vasconcelos de Oaxaca, en su calidad de candidato a gobernador, donde lo recibí con una severa crítica porque como senador votó a favor de las reformas en materia indígena, que son incongruentes con el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo.
Claro, en la academia te puedes permitir ciertas licencias. Pero hasta ahí mi relación con Ulises Ruiz. Luego trabajé, por azares del destino, con alguno de sus colaboradores, de segundo, tercer o cuarto nivel. En esos espacios donde tienes muchas responsabilidades y escasos estímulos y donde generalmente los funcionarios de primer nivel nunca meten las narices.
Así es Oaxaca, pero aparte de esto, la Kikis dice que el verdadero estratega en este desmonche es Felipe Calderón, el presidente de México, porque sedujo al PRD y al PRI, le metió un freno al PRI y se echó a la bolsa al PRD, en un juego de tres bandas, porque---según dice la Kikis---, la única víctima de esta morbosa relación es Andrés Manuel López Obrador, que se ha quedado como el perro de las dos tortas.
La verdad, yo ya estoy echo bolas y prefiero no meterme en camisa de once varas.
Que el tiempo los juzgue.
Vale
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