lunes, 7 de noviembre de 2022

Cantería de metates: un oficio que se niega a morir







Uno de los oficios más antiguos en el Estado de Oaxaca es el de los canteros que desde tiempos prehispánicos se dedican a elaborar metates, molcajetes y algunas figuras en piedra volcánica.

Como se sabe, los metates son piedras rectangulares con cierta inclinación y sobre patas o soportes, en una sola pieza, sobre la que se muele el maíz, el cacao u otros alimentos con el apoyo de una "mano de metate" que es un mazo cilíndrico.

Los molcajetes son recipientes cóncavos, también con tres patas, en una sola pieza que sirven para preparar salsas y para moler especias, con el "ajolote" o piedra pequeña de forma ovalada.

Hoy en día ha venido disminuyendo el uso de los metates--debido a la existencia de molinos y de las licuadoras de cocina--, y también debido a su peso, ya que se trata de piezas de piedra volcánica que llegan a pesar más de veinte kilos.

Sin embargo, en varias comunidades indígenas de los valles centrales de Oaxaca todavía existe la tradición de las bodas, en la que los padrinos de confirmación de la novia, le obsequian a su ahijada un metate. Tradición afortunada que ha mantenido a flote la producción de metates. 

Así lo afirma el maestro Zenón Rosario, cantero de metates del municipio de La Magdalena, Ocotlán, ubicado a unos 40 kilómetros al sur de la Ciudad de Oaxaca de Juárez, y que desde hace varias generaciones se dedica a este oficio.


El procedimiento para hacer un metate inicia desde la extracción de la piedra volcánica en las minas a cielo abierto de la comunidad y se trasladan los bloques adecuados al taller del artesano, donde se trabaja pacientemente con cincel, martillo y algunos recursos como el esmeril.

A veces las mujeres decoran con pintura los metates y los molcajetes.

Un molcajete mediano—digamos unos 30 centímetros de diámetro cuesta entre 400 y 500 pesos--, según el acabado de la superficie externa, ya que las superficies lisas se pueden picar para darle un acabo más rústico, que es más atractivo.

Un metate regular, de unos 50 centímetros de longitud, puede costar hasta los cinco mil pesos.

El maestro Zenón hace notar que, ante la escasa demanda de los metates y molcajetes, las personas se dedican de medio tiempo a esta actividad y que además enfrentan la competencia de los artesanos del estado de Puebla que traen metates y molcajetes de materiales de menor calidad y a menor precio.

El maestro Zenón está consciente de que hay competencia, pero asegura que el trabajo de los artesanos oaxaqueños es de mejor calidad, “tenemos la mejor piedra, que es muy resistente y no se desmorona tan fácilmente como los materiales poblanos y tenemos la tradición de la técnica que es herencia de nuestros antepasados, lo que garantiza la calidad de cada una de nuestras piezas.”

Estas artesanías se pueden apreciar y adquirir en el mercado que se instala los días viernes en el mercado del municipio de Ocotlán de Morelos o en la propia localidad de La Magdalena.