El Gobernador del Estado de Oaxaca propuso desaparecer oficialmente entre otros organismos al Instituto Estatal de Desarrollo Municipal (IDEMUN).
Se espera que en un par de días la Cámara de Diputados local apruebe la iniciativa de decreto, ya que el titular del IDEMUN, incluso antes de que se desaparezca oficialmente, ha sido nombrado en otro cargo dentro de la estructura de gobierno.
No era para menos.
Un organismo con uno de los presupuestos más bajos del Estado y con una plantilla compuesta de tres direcciones de área, siete jefaturas de departamento y una decena de personal de apoyo y sin la infraestructura básica para el cumplimiento de sus objetivos, eran la mayor evidencia de la ausencia del municipio en el Plan Estatal de Desarrollo.
Son estilos de gobernar.
La entidad con el mayor número de municipios del país (570), ha carecido de una política pública municipalista.
Mientras que en otros Estados de la República se vigoriza al municipio con organismos especializados en su orientación y fortalecimiento, en Oaxaca, por el contrario, es una materia que no es prioritaria, a pesar del bajo perfil institucional de los ayuntamientos de la entidad.
Nunca como antes, los municipios de Oaxaca habían recibido tantos recursos de la federación.
Al mismo tiempo, nunca como antes, se incrementaron las necesidades de asesoría y capacitación de los ayuntamientos de Oaxaca, que presionados por la modernización del municipio a nivel nacional, reman hoy a contracorriente por su ancestral rezago institucional.
Integrantes de ayuntamientos con un nivel promedio de tercer año de primaria, con escaso dominio del idioma español y con una creciente responsabilidad de gobierno y administración demandan hoy más que nunca del apoyo gubernamental para brindarle eficacia a su gestión municipal.
No es gratuito que durante el 2008 se haya denunciado a 949 autoridades municipales como responsables de violaciones a derechos humanos.
Oaxaca es un campo fértil para impulsar el municipalismo como una cultura federalista.
El gobierno estatal pudo asumir el liderazgo, pero prefirió renunciar a ese desafío.
Tal vez algún día habrá tiempos mejores para los municipios oaxaqueños…
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