El voto de los oaxaqueños en USA y el chupacabras

El chupacabras era un distractor.
Parece que desafortunadamente los futuros legisladores oaxaqueños agrupados en la Coalición por la Paz y el Progreso de Oaxaca, emanados del PAN, PRD, PC Y PT, están buscando más un impacto mediático que una eficacia legislativa.
Derivado de ímpetu de cambio---vamos a ver si así como comienzan terminan---, han anunciado que apenas rindan protesta van a proponer modificar la legislación electoral para permitir en el Estado de Oaxaca la votación de los oaxaqueños que radican en Estados Unidos.
Esta propuesta ya tiene varios años que se ha discutido en Oaxaca, incluso, en un foro estatal, uno de los jóvenes representantes de una de las organizaciones de oaxaqueños radicados en USA, vestido impecablemente con un envidiable traje de marca, fue contundente y dijo más o menos así: “La verdad a mí no me beneficia ni me perjudica votar desde Estados Unidos para elegir a los representantes populares de Oaxaca, incluso si me dieran una diputación para la Cámara de Oaxaca, yo no tendría mucho que hacer porque no conozco los problemas de Oaxaca. Es cierto que desciendo de oaxaqueños, pero toda la vida la he pasado en Estados Unidos. En todo caso, conozco mejor los problemas de mi Estado adoptivo y las formas para solucionarlos que los problemas de Oaxaca. Yo no veo, honestamente que esto tenga mucha eficacia.”
Suponiendo que los diputados en su iniciativa le apostaran al corazón de la raza para reivindicar sus derechos de participación política. Entonces habrá que recordarles que en diversos estados de la República están asentados miles y miles de oaxaqueños que podrían votar en elecciones del estado e, incluso, tener un representante en la Cámara de Diputados de Oaxaca. Y si lo cosa realmente va en serio y no tiene tintes populistas y no se discriminará a unos de otros, como ya se ha comentado en otras ocasiones el supuesto trato diferenciado a favor de algunas comunidades en USA, entonces sería bueno que los diputados electos empezaran por poner la casa en orden, ya que en el Estado de Oaxaca, al menos en la mitad de los 418 municipios de usos y costumbres, las mujeres no pueden ser electas ni tienen derecho al voto para cargos en el ayuntamiento; es más, para que vamos tan lejos, en la propia ciudad de Oaxaca de Juárez existen tres agencias municipales en las que los avecindados no tienen derechos políticos y ya no digamos el número de agencias municipales en el Estado de Oaxaca que no pueden votar ni ser electos para integrar ayuntamientos por usos y costumbres.
Ojalá los enjundiosos diputados electos no se estén resbalando, porque objetivamente están mandando otras señales, o pecan de ingenuos o de perversos. Cualquiera que sea el caso parece que están construyendo otro chupacabras.