martes, 11 de agosto de 2009

El Diablo murió en Salina Cruz





JR jura que fue cierto.
Arribó en Salina Cruz, proveniente de un buque camaronero de Sinaloa.
De unos cuarenta y cinco años, alto como de dos metros y fornido. De tez blanca, cabeza cuadrada, nariz aguileña, bigote de alacrán y enorme y ancho mentón.
Vestía un pantalón de mezclilla, botas de cuero y camiseta de color claro, portando un enorme puñal en el cinturón.
Le decían "El Diablo" porque ningún nombre podría describir mejor su comportamiento irascible, agresivo, irracional y homicida.
Entraba a los restaurantes y si no le daban de comer gratis causaba destrozos y golpeaba a los meseros. Robaba lo que le gustaba y posteriormente lo destruía con saña. Las mujeres le temían y huían ya que tenía fama de abusador sexual.
La policía siempre le tuvo miedo y preferían dejarlo hacer, deseando que se regresara por donde llegó. Pero el Diablo no tenía la intención de irse. En ningún lugar le habría resultado tanto respeto su ferocidad como en Salina Cruz. Los crímenes que cometía eran celosamente callados por la población.
El Diablo escogió la cantina principal de Salina Cruz como su despacho personal y aquel que osara sentarse en su mesa generalmente acaba apuñalado, por lo que esa mesa era respetada por los salinacrucenses.
Llegó un día a Salina Cruz un pasante de medicina a realizar sus prácticas profesionales y pareciéndole agradable la mesa que nadie ocupaba se sentó a tomarse una cerveza. Todo mundo le sugería que no ocupara esa mesa, pero nadie le decía por qué. Tal vez porque la población quería probar si el nuevo visitante pudiera ponerle un alto a los abusos del Diablo, que efectivamente, llegó y se sorprendió de la tranquilidad y el rostro afable del joven médico completamente vestido de blanco que ocupaba su mesa favorita.
Se miraron mutua y calladamente en medio del frío silencio y las miradas de los parroquianos, que esperaban a conocer el nuevo crimen del Diablo, pero el Diablo oteaba desconcertado, había algo en los ojos de ese estudiante de medicina que no cuadraba con sus víctimas, de modo que derribó la mesa con furia y tomando por el cuello al joven doctor le gritó en la cara:
--"·$%&/() ¿Qué haces en mi mesa? Te prohíbo que ingreses a esta cantina y si lo vuelves a hacer te voy a matar." y lo empujó hacia la salida, aventándolo en medio de la calle. La gente respiró tranquila y todos volvieron a sus ocupaciones.
No contaron que al día siguiente, se presentó nuevamente el joven estudiante de medicina y ocupó la misma mesa y pidió una cerveza. La cantina de pronto se llenó de curiosos que abarrotaron el lugar para esperar la hora en que llegaba el Diablo y ver cómo le daba su merecido a aquel terco aspirante a Doctor.
El Diablo llegó y viéndo ocupada su mesa por la misma persona, levantó las cejas, con ojos desorbitantes, el rostro rojo de ira y empuñando su filoso puñal se lanzó sobre el impávido y solitario pasante de medicina.
No acaba de dar dos pasos cuando se oyó un disparo de pistola y aquel terrible Diablo cayó pesadamente con una mirada de sorpresa tratando de frenar la sangre que le brotaba del corazón. De entre la gente que había llenado la cantina una mujer gritó por inercia "llamen un doctor". Pero el único doctor que había en el lugar miraba con atención las reacciones del Diablo, mientras guardaba en su bata blanca una pistola calibre 45.
La policía llegó de inmediato y preguntó a todos los asistentes si habían visto al asesino. Pero la educada población de Salina Cruz, dijo que no vieron nada, sólo una persona que salió huyendo despavorida del lugar con una pistola en la mano. La policía le preguntó entonces al único doctor que había en la cantina, si la persona herida tenía alguna salvación. Pero el pasante de medicina consultado movió la cabeza con resignación, diciendo "---no tiene salvación." y ordenó otra cerveza.
Nadie dijo nunca nada y hoy en día aquél héroe anónimo que salvó a Salina Cruz de la furia del Diablo, es un exitoso médico que ejerce en la Ciudad de Oaxaca de Juárez.
Bueno, así me lo dijo JR quien jura que fue verdad...
J. Edgar López G.













4 comentarios:

  1. no mms esta larga y yo lo queria para mi tarea

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  2. esta larga y la necesitaba para mi tarea y no quiero copiar tanto

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  3. yo también la nesecito para mi tarea pero está
    Está muy larga yo mejor voy a buscar otra

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