lunes, 31 de agosto de 2015

Feminicidio y adulterio

El delito de feminicidio – o crímen por odio contra las mujeres -, es multicausal.

Cualquiera que sea la causa, no se justifica.

Hace más de cinco años se realizó un estudio sobre el feminicidio en Oaxaca, por parte de una dependencia estatal y una Organización No Gubernamental, con recursos federales.

Como parte del diagnóstico se identificó y entrevistó a varios hombres presos en distintos reclusorios del estado que cometieron crímenes sanguinarios en contra de mujeres y que, de acuerdo con la metodología, esos crímenes podrían ser tipificados como feminicidios.

Al narrar de manera voluntaria sus crímenes, algunos de estos sujetos, que eran novios, esposos o amigos de las víctimas, manifestaron motivos pasionales, principalmente el adulterio de la mujer, como la causa que los llevó a privarlas de la vida.

Los criminales sentenciados en la cárcel  y que aceptaron las entrevistas mostraban  una enorme disposición para contar sus historias con la mayor descripción, a la manera de quien tiene la necesidad de ser escuchado sobre una historia que se ha analizado y reconstruido en la soledad del encierro, por lo que las narraciones resultaban precisas y escalofriantes.

En esos crímenes de violencia extrema para privar de la vida a las mujeres se distingue una suma histórica de agravios entre la pareja. De modo que el homicidio venía a ser como al colofón lamentable de relaciones humanas complejas, desgastadas y violentas.

Al señalar los motivos pasionales como una de las múltiples causas del feminicidio—el adulterio es común entre hombres y mujeres--- también se ha identificado que afectan a varones adúlteros(en un reclusorio del centro es muy conocida una historia de una mujer con estudios de posgrado que purga una sentencia por un homicidio sanguinario en contra de su marido adúltero), y sin ser una generalidad, también este tipo de crímenes se han identificado dentro de la comunidad homosexual.

En la prensa frecuentemente se publican delitos de lesiones contra mujeres por motivos de celos e infidelidad y suceden en cualquier estrato social y económico, evidenciando una cultura machista, por la que la reacción del hombre ante casos de infidelidad, a veces resulta fatal.

A partir de esta idea, la reacción del hombre es más violenta cuando descubre que su mujer le ha sido infiel y no son pocos los casos de crímenes sanguinarios en contra de varones que se han involucrado con mujeres casadas.

Tratándose específicamente del feminicidio por adulterio, sin demeritar otras causas, se deben tomar medidas desde las políticas públicas de género, que aborden esta problemática sin prejuicios y se puedan instituir medidas de prevención y de apoyo.

Hasta ahora, las acciones institucionales se han focalizado en la creación de instancias judiciales que atienden a mujeres agredidas y se han perfilado nuevos tipos penales para castigar con mayor rigor a quienes privan de la vida a mujeres, como el caso del delito de feminicidio. ¿Pero, qué hay de la prevención?

Sin duda que se trata de un tema muy complejo porque la sexualidad es un asunto íntimo de la pareja o de la persona y que obedece propiamente a su educación, convicción y responsabilidad.

Hoy en día el adulterio, o la infidelidad sexual de la pareja, ha dejado de ser un delito a nivel federal, no obstante de que es un tema muy delicado porque afecta la confianza máxima que existe en una relación y que es causa de algunos crímenes sangrientos, como el feminicidio.

Por eso es importante que al nivel de formalización de la pareja, en el caso del matrimonio civil, se advierta y se aperciba a la pareja sobre el alcance de sus compromisos. El contrato matrimonial tiene por objeto asegurar la fidelidad de la pareja, pero si no fuera el caso, los consortes deben saber que la infidelidad es causa de divorcios y de crímenes indeseables.


Y en ese sentido debe ir la prevención: si usted quiere tener sexo fuera del matrimonio o de su relación sentimental y su pareja no es capaz de tolerarlo, primero divórciese o sepárese, para que no vaya a provocar un daño irreparable.