Tejedor de paisajes

Es tan huraño como talentoso.
Su aspecto permite deducir que es originario de algún municipio del istmo.
Al menos sus huaraches son de los que se acostumbra a hacer por esos rumbos.
No le gusta que le tomen fotos.
La que se presenta aquí fue tomada sin que se diera cuenta, pero cuando lo notó se escondió detrás de su caballete y se mostró hostil.
Pero los artistas no tienen por qué ser extrovertidos.
Cualquier día de la semana se le puede encontrar en alguna esquina de la Ciudad de Oaxaca de Juárez que tenga un buen paisaje para tejer.
A veces un cuadro le tarda una semana o hasta diez días.
Como éste que estaba realizando el domingo pasado frente al templo de Santo Domingo de Guzmán, con el que llevaba ya cuatro días.
Es probable que alguna galería oaxaqueña tenga sus cuadros.
Sus instrumentos, aparte de la tela sobre la que teje, son propiamente una aguja y carretes de hilos comerciales.
Teje con maestría, ahora sí que sus puntadas son certeras. No duda ni un segundo cuando inserta la aguja y se concentra en ver y tejer al mismo tiempo.
Me imagino una entrevista más o menos en estos términos:
---¿Cómo te surgió la idea de tejer paisajes?
---No es tejido. Si bien utilizo hilos, estoy pintando paisajes. Lo que cambia es que utilizo hilos de colores en vez de pintura líquida y se me ocurrió porque desde niño veía como tejen y un día se me ocurrió experimentar con retratar la realidad.
---¿Antes de dibujar con hilo dibujas sobre la tela con lápiz?
---Al principio sí, ahora no. Es más fácil establecer unos puntos de referencia básicos y a partir de ahí reproduzco el resto.
---¿Qué paisajes prefieres para reproducir?
---Esto no tiene límites, el límite es la imaginación. Pero existe un mayor contraste cuando hay edificios porque se perfilan mejor las formas.
---¿Es tu arte impresionista?
---No, de ningún modo. Es auténticamente oaxaqueño y yo creo que debería de llamarse IMPRESIONISTMO.
Va nuestro reconocimiento a este artista de nuestro tiempo.
Vale.

Hoy hablé con Don Panchito

No ha cambiado nada.
Cuando platica con uno está pensando en otra cosa y casi no te deja hablar.
Y pensar que esperé muchos meses para esta entrevista de trabajo.
Me ofreció apoyar a su secretario particular. Al principio me entusiasmó la idea, pero cuando pregunté quién era su particular, se me fueron las ganas.
Los comentarios de Don Panchito son intrascendentes, a menos que toques su punto débil:dar consejos.
---Don Panchito, ¿qué me recomienda ante la crisis?
---Métete a la política. La política es el arte de hacerte justicia por propia mano. Como ciudadano nadie te va a valorar nunca. Sin embargo, en la política adquieres valor. El valor de ser imprescindible. Simpre va a ver alguien que necesite de tus servicios, no necesariamente para reformar, para combatir la corrupción o para ser el mejor gobierno, nada de eso. En política siempre se necesita alguien de confianza para hacer negocios. La democracia es injusta porque hace que cualesquier puesto que ocupes, sea transitorio. Entonces, necesitas ser imprescindible y si no sirves a alguien sírvete a tí mismo y busca quién te pueda servir.
---¿Y el compromiso ético, la moral, la responsabilidad pública, dónde queda?
---Si eres iluso nunca vas a triunfar en política. En política no esperes que todos compartan tus ideas o tus valores. El buen político es un buen vendedor. Si estás abajo tienes que venderle a los de arriba. Si estás arriba tienes que venderle a los de abajo y cobrar bien por tu trabajo.
---¿Aunque para ello tenga que incurrir en actos de corrupción?
---¡Ja, ja, ja! Ningún político escapa a la corrupción. Es parte de la definición de ser político. En política nunca están los mejores hombres. La política es para gente con ambición, con visión y coraje de superarse por encima del resto. Yo digo, "a que lloren en mi casa a que lloren en la tuya" que es lo mismo que "a que coman en mi casa a que coman en la tuya". En política el que no tranza no avanza. Si eres pusilánime o tienes remordimientos metete de cura, así por lo menos vas a estar cerca de los monaguillos...¡ja, ja, ja!
---Bueno, Don Panchito, le agradezco mucho que me haya recibido y le agradezco infinitamente la oportunidad que me brinda para ayudarlo. Lamentablemente el horario que me requiere no lo puedo satisfacer por compromisos adquiridos con anterioridad.
---Tal vez a tí nunca te vea en la política.
---Tal vez---contesté y pensé para mis adentros que si incursiono alguna vez en política será precisamente para combatir a los miles de Panchitos que como plaga impiden la justicia y el desarrollo con equidad.
El tiempo lo dirá.

Política a la oaxaqueña

Fue como en los viejos tiempos.
Por una feliz coincidencia encontré en una cafetería de la ciudad de Oaxaca a dos viejos amigos de mis tiempos de burócrata de la federación. Más o menos de la misma generación, solíamos reunirnos en algún Samborns del DF para componer el mundo a patadas y después de discutir hasta rabiar terminábamos fijando la próxima fecha para reunirnos y continuar con nuestro gozoso remiendo de lo imposible.
En esta ocasión no pude evitar la pregunta que naturalmente se le haría a alguien que vive en Oaxaca, ¿cómo está la cosa política por acá?
Dije que sólo sé que habrá elecciones para la gubernatura, para diputados locales y presidentes municipales y que en Oaxaca cualquier análisis tiene pertinencia porque somos un estado mágico en el que cualquier cosa puede pasar.
Como no convencí a mis amistades, que saben de mi manejo filoso del bisturí desde mis tiempos de juventud, de mis pretensiones reformistas y mi enconado desprecio por la corrupción, empezaron a provocarme para hablar sin tapujos de mi experiencia como empleado de gobierno y ahora ex empleado.
Creo que no tuve que exagerar las cosas para decir que se puede mejorar mucho Oaxaca, la función de gobierno y la administración pública. El papel de los poderes del Estado y la necesidad de impulsar reformas que nos saquen de la lista de los estados perdedores de la república, aquellos que se destacan por su endémico subdesarrollo.
Después reviré la pregunta para ver cómo nos ven desde fuera y literalmente dijeron:
"Ustedes tienen mala suerte porque han tenido gobiernos muy corruptos y muy ineficientes".
"El problema de Oaxaca es que han tenido malos gobiernos, malas oposiciones y malísimos políticos".
"Oaxaca seguirá siendo una isla bananera si la ciudadanía honesta y comprometida con todos los oaxaqueños no toman por asalto los partidos y renovan las prácticas políticas que vienen reproduciendo desde la colonia".
"A la federación le conviene un estado retrasado con políticos corruptos porque de esa manera el poder transnacional seguirá expoliando a su estado"
Dejé que se desahogaran, pero cada sentencia era como una pesada loza que me descubrían sobre la espalda en mi calidad de ciudadana originario de Oaxaca.
Creo que es la única discusión en que les he dado la razón.
Me consta.

Oaxaca territorio de fraudes

No es la primera vez.
Hay unos pillos que se hacen pasar por funcionarios o autoridades y extorsionan a las autoridades municipales con la promesa de gestionarles en donativo ambulancias, camionetas, maquinaria, juguetes y ropa supuestamente que ha sido decomisada por hacienda. A cambio de eso les piden jugosos anticipos que los presidentes municipales bien intencionados les otorgan sin la mayor formalidad.
Cuando se les ha otorgado el dinero desaparecen como por arte de magia.
Existe otro tipo de fraudes más elaborados.
Son empresas fantasmas, sin domicilio fiscal y sin teléfono fijo que ofrecen realizar obra pública a los ayuntamientos a precios irrisorios. Ellos dicen que tienen contactos en el gobierno y hasta le prometen una compensación a las autoridades municipales si les brindan una obra determinada.
Obvia mencionar que esto se traduce en anticipos que se evaporan o en el mejor de los casos en obra pública mal hecha o con vicios ocultos.
En todo el territorio oaxaqueño hay una novedosa fuente de fraudes que cometen las cajas de ahorro.
De las cientos de cajas de ahorro que hay en el estado, al parecer sólo dos están regularizadas por las autoridades en la materia.
Pero eso no lo sabe la población.
Las cajas de ahorro se multiplican como hongos gracias a que tienen una mayor cobertura en la mayoría de los municipios del estado, las operaciones que realizan son sumamente sencillas, el trato con el cliente es personalizado--nada que ver con la burocracia bancaria--- y sobre todo, la gente cree que las cajas pagan intereses mucho mayores que los bancos.
Además es relativamente sencillo abrir una cooperativa de ese tipo y las propias autoridades municipales tienen una nula intervención, ya que en la mayoría de los ayuntamientos no se cobran ni se expiden permisos de funcionamiento.
El caso es que en Oaxaca existen decenas de fraudes en los que las cajas de ahorro generalmente desaparecen de la noche a la mañana y se reinstalan en el mismo lugar con otros nombres y otros empleados.
Y usted, ¿Ya abrió su cuenta en la caja de ahorros de la esquina?

El mejor candidato para Oaxaca no llegó

Era el mejor.
El Presidente de la República lo miró con cautela y le insistió: "Usted es un águila y en Oaxaca se va a sentir como en una jaula".
Pero el candidato sabía que las palabras del presidente, como se demostró en sus actos posteriores, eran una expresión de terror creciente porque de llegar a la gubernatura sería el candidato natural para ganar la presidencia y de ahí cambiar todo el status quo.
Su contrincante principal, el candidato oficial, no hacía nada y ni podía. Todo se lo hacían.Y tampoco era consciente de la fama que le construía la maquinaria oficial. Como un objeto puesto ahí por las circunstancias del poder se dejaba seducir y asumía su destino con la resignación de un lechón al que engordan antes de llevarlo al matadero.
Lo que vendría después era previsible. En palabras del propio candidato "Regresé a Oaxaca a presenciar en la impotencia el fraude acompañado de la violencia y el cinismo... Los cómputos oficiales se inventan en la oficina gubernamental y se dan al público que agacha la cabeza y se conforma..."
No era para menos, el recurso legal de la apelación fue frenado y la diputación oaxaqueña se sometió al poder central desconociendo el fraude.
Continúa el candidato: "Toda la plana mayor de mis partidarios oaxaqueños se portó heroicamente; muchos de ellos tuvieron que salir del Estado a causa de las persecuciones desatadas en su contra. A unos los asesinaron, a otros los encarcelaron y a otros los aniquilaron con impuestos exagerados y abusos. Se propuso el gobierno extinguir aquella semilla de futuras rebeliones y lo consiguió.
"Ya no volvería a ser Oaxaca Estado que daba orientaciones a la República. Los oaxaqueños patriotas quedaron deshechos y el Estado convirtióse en feudo de los políticos. Los diputados jovenes que se sometieron al régimen hicieron con el tiempo fortuna considerable. De su miseria, el Estado ha dado para todo."
De esta manera, el mejor candidato, José Vasconcelos, perdía en 1924 la elección para gobernador del estado de Oaxaca ante una maquinaria oficial que poco ha cambiado.
(Bibliografía: Además de los libros de la extensa biografía de José Vasconcelos en Editorial Botas, y los que reeditó la SEP hace años en su colección de Lecturas Mexicanas, existe una excelente compilación de esos materiales en el tomo 123 de la maravillosa Biblioteca del Estudiante Universitario, editado por la UNAM, y que se titula JOSE VASCONCELOS: HOMBRE, EDUCADOR Y CANDIDATO.)